Estrella multipremiada de la industria musical, con más de 50 millones de álbumes vendidos y 150 millones de descargas digitales de sus discos, esta cantante y compositora nacida en Pensilvania en 1989 se destaca por su arte y como defensora de los derechos de las mujeres y de la comunidad LGTB+.

Por Emilia Carboni
Su carrera
Taylor comenzó su carrera musical a los 15 años tocando en el bar “The Bluebird café”, donde conoció al productor Scott Borchetta quien la contrató para su nueva discográfica “Big Machine Records”(BMR). En ese momento Taylor tocaba música country.
La cantante grabó seis álbumes («Taylor Swift», «Fearless», «Speak Now», «RED», «1989» y «Reputation») con esta discográfica, pero en 2018 decide firmar con una distinta «Universal Music», sin embargo todos los derechos de sus grabaciones originales estaban con su antigua discográfica. Más tarde BMR fue adquirida por «Ithaca Holding», discográfica dirigida por Scooter Braun, con quién la cantante habia trabajado anteriormente y a quien había acusado de bullying y acoso. Braun decide no devolverle los derechos de su música a Swift para así poder venderlos. «Ahora Scooter me ha despojado del trabajo de mi vida, del que no tuve la oportunidad de comprar. Básicamente, mi legado musical está a punto de caer en manos de quien ha intentado desmantelarlo» dijo Swift.
Aunque Taylor no cuenta con los derechos de las grabaciones originales de sus primeros seis discos, sí tiene los derechos de las composiciones. En 2019 Swift prometió que se iba a dedicar a regrabar los álbumes que le habían arrebatado, y así fue. En la actualidad, Taylor cuenta con esos primeros álbumes, tres de ellos («Lover», «Folklore» y «Evermore») con su nueva discográfica; además regrabó «Fearless Taylor Version» y anunció que el 12 de noviembre de este año, lanzaría su segundo álbum regrabado «Red Taylor Version», que con contará con las 30 canciones que iban a estar originalmente en este álbum.
La desaparición de Swift
A los 17 años, Swift ganó el premio Billboard Music Award por mejor video musical. Mientras ella agradecía a su familia y a sus fans, el cantante de hip-hop Kanye West subió al escenario y le sacó el micrófono de las manos para decir que ella «no merecía ese premio y que debía ser para el video de Beyonce». Este hecho retumbó en todos los canales de entretenimiento de la televisión internacional. Algunos se manifestaban en contra de Swift, pero la mayoría estaba en contra de Kanye West. Días después, el hecho había pasado y los rumores desaparecidos.
El incidente se creía olvidado, hasta que en 2016 West decide lanzar la canción «Famous «, en la que decía «I feel like me and Taylor might still have sex. Why? I Made that bitch famous» («Siento que Taylor y yo todavía podríamos tener sexo. ¿Por qué? Hice famosa a esa perra»).Tras la polémica que está canción desató West dijo en varias entrevistas que él había tenido el consentimiento de Swift para llamarla así, también filtró un vídeo de una videollamada entre los dos cantantes en dónde se escuchaba a West pidiéndole permiso a Taylor para poder usar su canción y a la cantante aprobándola.
Swift negaba este video y decía que se trataba de un vídeo editado (meses más tarde se comprobó que el material había sido manipulado). Toda esta controversia despertó a los haters de Swift quienes pegaron con todo lo que tenían y también logró que muchos fans empezaran a odiarla. En cuestión de minutos el hashtag #TaylorSwiftisOverParty (en el cual todos sus haters se encargaban de decir lo que pensaban de ella) fue tendencia en Twitter no sólo en Estados Unidos, sino también en muchos otros países alrededor del mundo.

La polémica creció y muchos otros artistas no dudaron en no quedarse afuera. Luego de tanto odio, Taylor Swift decidió desaparecer del ojo público. Nadie sabía nada de ella, sus redes no estaban activas, no daba entrevistas, no subía música, no había nada, era como si se la hubiese tragado la tierra de un día para el otro.
Un año más tarde, Swift reapareció con su álbum «Reputation», donde habla de todo el sexismo y el machismo de la sociedad además de plasmar todo su dolor en él.
Luego de tanto odio, Taylor Swift decidió desaparecer del ojo público. Nadie sabía nada de ella, sus redes no estaban activas, no daba entrevistas, no subía música, no había nada, era como si se la hubiese tragado la tierra de un día para el otro.
Su apoyo a las comunidades
Taylor se ocupa constantemente de mostrar su apoyo a la comunidad LGBT+ y a los derechos de las mujeres. Lo hace a través de sus redes, en sus conciertos, en canciones o hasta videoclips.
Desde los comienzos de su carrera, Swift prefirió quedarse fuera de todo lo que tenga que ver con la política. Decía que la gente la escuchaba por su música no por su lado político, nunca mostraba sus opiniones y tampoco se la notaba inclinada para un lado o el otro.
En 2018 Marsha Blackburn decide postularse para senadora en el estado de Tennessee, Estados Unidos. Esta candidata votó en contra la reautorización de la Ley de Violencia contra la Mujer, que se encarga de proteger a las mujeres del acoso, las violaciones y la violencia doméstica. Tampoco está a favor del matrimonio igualitario y se opone a los derechos de las personas homosexuales.
Aunque Swift estuvo alejada de la política porqué sabía cómo eso podía afectar a su carrera musical no pudo evitar interferir. Taylor subió un posteo a Instagram diciendo lo que pensaba de Marsha Blackburn: «No puedo votar por alguien que no va a estar dispuesto a pelear por la dignidad de TODOS los Estadounidenses, sin importar su color de piel, su género o a quién aman (…) Por más de que me gustaría seguir votando a mujeres, no puedo apoyar a Marsha Blackburn».
Luego de que Swift mostró su opinión política, en las siguientes 24 horas se habían registrado para votar 51.308 personas más. Marsha Blackburn ganó las elecciones, pero Taylor no se quedó con los brazos cruzados y lanzó una canción llamada «Only The young», en la cual intenta dar esperanza a las personas que se vean afectadas por las nuevas medidas que tome la nueva senadora y que intenten resistir ya que en algún momento van a poder cambiarlo.